¿Has oído hablar de la uveítis? ¿Sabes qué síntomas o causas puede tener esta inflamación? En este post de NTC Pharma te contamos todo lo relativo a esta inflamación y qué tratamientos tiene. ¡Sigue leyendo para no perderte nada!
¿Qué es la uveítis?
La uveítis es una forma de inflamación ocular que afecta a la capa media del tejido de la pared ocular o úvea.
La úvea es la capa de tejido intermedia de la pared del ojo, está formada por el iris, el cuerpo ciliar y la coroides. El iris se sitúa en la parte delantera del ojo y el cuerpo ciliar es una estructura situada justo detrás del iris. Mientras que la coroides es una capa de vasos sanguíneos entre la retina y la esclerótica.
Esta afección puede ser grave y llegar a provocar la pérdida de visión permanente. Además, la uveítis puede ocurrir en uno o ambos ojos y afecta a personas de todas las edades, incluido niños.
Los síntomas de la uveítis aparecen de repente y empeoran con mucha rapidez, aunque pueden presentarse de manera gradual. A veces, incluso, no hay síntomas y se observan signos de uveítis en una revisión periódica de la visión.
Entre los síntomas de la uveítis encontramos:
- Dolor ocular
- Ojo rojo
- Visión borrosa o reducida
- Sensibilidad a la luz
- Enrojecimiento de ojos
- Puntos oscuros que flotan en el campo de visión
Un rápido diagnóstico y tratamiento para la uveítis puede prevenir complicaciones y ayudar a preservar la visión.
Causas de la uveítis
La causa específica de la uveítis no está clara en la mayoría de los casos, puede incluso considerarse una enfermedad autoinmunitaria que solo afecta a uno o a los dos ojos.
Sin embargo, si la causa de la uveítis se determina, puede ser alguna de estas:
- Efecto secundario de un medicamento
- Traumatismo o cirugía ocular
- Infección ocular como un arañazo de animal, herpes zóster, la sífilis o la toxoplasmosis, entre otras
- Enfermedad autoinmune o inflamatoria que afecta a otras partes del cuerpo como la sarcoidosis, el lupus eritematoso sistémico o la enfermedad de Crohn, entre otras
- Tumores intra y extraoculares
- Edema de la retina, cicatrices en la retina, glaucoma, cataratas, daño al nervio óptico, desprendimiento de retina o pérdida permanente de la visión
Las personas que fuma son más propensas a desarrollar uveítis y, además, se asocia con una uveítis difícil de controlar. Por eso, sino se trata, la uveítis puede provocar complicaciones como: hinchazón de la retina, cicatrices en la retina, glaucoma, cataratas, daño al nervio optimo, desprendimiento de retina o pérdida permanente de la visión.
Además, existen varios tipos de uveítis que inflamarán una parte u otra del ojo:
- Uveítis anterior o iritis: afecta al interior de la parte frontal del ojo y al cuerpo ciliar. Es el tipo más común de uveítis.
- Uveítis intermedia: afecta a la retina y a los vasos sanguíneos justo detrás del cristalino, así como al gel del centro del ojo.
- Uveítis posterior: afecta a una capa que está dentro de la parte posterior del ojo, ya sea la retina o la coroides.
- Panuveitis: se produce cuando todas las capas de la úvea se inflaman, desde el frente hasta la parte posterior del ojo.
Tratamientos para la uveítis
Dependiendo de cuál sea la causa de la uveítis, el tratamiento irá destinado a ella. Por ejemplo, si es una afección subyacente, el tratamiento se centrará en curar esa enfermedad.
Pero como hemos mencionado antes, la causa de la uveítis muchas veces es desconocida. Por eso, normalmente el tratamiento de la uveítis es el mismo cuando la enfermedad no sea infecciosa. El objetivo es reducir la inflamación en el ojo y en las partes del cuerpo donde esté presente.
El tratamiento de la uveítis es tratar la causa sea una infección del propio ojo sea una enfermedad externa al mismo. En la mayoría de los casos se ponen gotas para tratar la inflamación que suelen ser corticoides y dilatadores de la pupila (midriáticos). Se pueden añadir tratamientos específicos en función de la etiología de la misma.
Suelen ser tratamientos largos y es importante controlar la causa de la uveítis para evitar nuevos brotes.